Erick Mita Arancibia
INTRODUCCIÓN
No cabe duda que la
educación es una poderosa herramienta que permite transformar la vida de las
personas y del entorno socioeconómico, por tanto, su mejoramiento en todos los
niveles, debería ser interés de gobiernos, instituciones educativas, docentes y
sociedad en general.
Sin embrago, pese a los
intentos de organizaciones internacionales y de gobiernos por mejorar la
educación, “millones de niños salen de la
escuela sin haber adquirido las competencias y habilidades básicas como la
lectura, escritura y cálculo (…), así como, es alto el porcentaje de jóvenes y
adultos que son considerados funcionalmente analfabetos”. (1)
De acuerdo a lo
anterior, es posible afirmar que las dimensiones del saber conocer, saber
hacer, saber ser y saber aprender, no están siendo desarrolladas en las
escuelas y peor aún en al ámbito de la educación superior boliviana, donde
predomina una educación de tipo conductista alejada de la práctica, donde la
memorización de contenidos pareciera ser el fin último de los proceso enseñanza
aprendizaje.
Ante este contexto
surge la neurociencia, como un enfoque desde el cual desarrollar la práctica
educativa tomando en cuenta el funcionamiento del cerebro y los procesos
mentales.
En este sentido, en el
presente ensayo se pretende realizar una breve aproximación a la definición de
neurociencia, para posteriormente analizar su relación con la educación,
describir algunos hallazgos de la neurociencia aplicados al ámbito educativo y
finalizar con algunas limitaciones que el contexto de las universidades
públicas podría imponer a la aplicación de esta tendencia cuyo éxito es
palpable en universidades europeas y norteamericanas. (2)
DESARROLLO
·
APROXIMACIÓN
AL CONCEPTO DE NEUROCIENCIA
En los últimos años han surgido diferentes términos
como ser neuromarketing, neuroeducación, neurodocencia, neurodidáctica,
neuroarquitectura, neurobiología, entre otros. Todas estas denominaciones
tienen un común denominador y forman parte de una tendencia interdisciplinar,
denominada neurociencia, misma que puede ser definida, como:
“Ciencias que estudian al sistema nervioso y
al cerebro desde aspectos estructurales y funcionales (…)”. (1)
“La Neurociencia es una área
interdisciplinaria cuyo objetivo es comprender el funcionamiento del sistema
nervioso”. (3)
“Es
la ciencia que tiene la capacidad de
enlazar la biología molecular y los estudios cognitivos, ha hecho que se
empiece a explorar la biología del potencia humanos, que podamos entender qué
nos hace lo que somos”. (4)
Las Neurociencias cobijan un área
del conocimiento que se encarga del estudio del Sistema Nervioso desde el
funcionamiento neuronal hasta el comportamiento. Obviamente, la comprensión del
funcionamiento del cerebro normal favorece el conocimiento y la comprensión de
anormalidades neurobiológicas que causan desórdenes mentales y neurológicos. El
propósito principal de las Neurociencias es entender cómo el encéfalo produce
la marcada individualidad de la acción humana. Es aportar explicaciones de la conducta
en términos de actividades del encéfalo, explicar cómo actúan millones de
células nerviosas individuales en el encéfalo para producir la conducta y cómo,
a su vez, estas células están influidas por el medio ambiente, incluyendo la
conducta de otros individuos. (5)
Las neurociencias han cobrado gran interés en las últimas décadas,
tanto por el conocimiento básico que genera como por su aplicación para mejorar
la salud mental de la sociedad. Sus temas de interés se extienden desde la
neurociencia molecular y computacional hasta la conducta, el aprendizaje y la
memoria, y los efectos del estrés y envejecimiento sobre el funcionamiento del
sistema nervioso. Esta gran diversidad temática hace de la Neurociencia un área
interdisciplinaria, en la cual convergen biología molecular y celular,
bioquímica, neurogenética, biofísica, farmacología, biología del desarrollo,
matemáticas, neurofisiología, neuroanatomía, neuropsiquiatría y ciencias cognitivas
en general. (3)
Cabe resaltar que al
estudiar el funcionamiento del cerebro y de los procesos mentales, las
neurociencias están posibilitando una mayor comprensión del proceso de
aprendizaje, por lo que están siendo aplicadas en al ámbito educativo, es
así que científicos y profesionales del
área educativa se encuentran trabajando con la finalidad de descifrar la
interrelación entre lo biológico y la enseñanza.
·
NEUROCIENCIA
Y EDUCACIÓN: NEUROEDUCACIÓN
Marc Prensky[1], señala, que el “sistema
educativo actual es anacrónico. Los estudiantes se aburren. Enseñamos de la
misma manera desde hace 200 años. ¡No
tiene ningún sentido!”. (2)
Repetir y memorizar
datos ha sido la premisa con la que durante muchos años y aún en nuestros días
algunos educadores encarar su actividad, este hecho ha originado muchos de los
problemas que atraviesan no solo los sistemas educativos, sino también la
sociedad. Al respecto es posible indicar que si bien el estudiante cumple un
rol preponderante en los procesos de enseñanza
aprendizaje, el rol del docente no es menos importante, ya que su labor va
dirigida a posibilitar el desarrollo de capacidades y competencias en los
estudiantes, todo ello en un ambiente de trabajo caracterizado por el “gusto
por el aprendizaje”, donde aprender no sea “aburrido”, sino “divertido”.
Entonces, las
neurociencias deben constituirse una
herramienta que aporte con nuevos
conocimientos a los docentes, referidos a cómo funciona el cerebro, sus
características, cómo se desarrollan los procesos de pensamiento, de
memorización de aprendizaje, de recuperación de información, olvido, entre
otros; para que a partir de su conocimiento y comprensión se puedan desarrollar
propuestas pedagógicas y métodos didácticos de carácter innovador,
orientados a generar un aprendizaje significativo en los estudiantes.
Es así que surge el
concepto de neuroeducación, entendido como:
“Una
nueva línea de pensamiento y acción que tiene como principal objetivo acercar a
los agentes educativos a los conocimientos relacionados con el cerebro y el
aprendizaje”. (1)
La neuroeducación toma
los conocimientos generados por las neurociencias, pedagogía y psicología, con
la finalidad de lograr una práctica pedagógica orientada y adecuada a los
procesos de funcionamiento del cerebro de los educandos.
·
HALLAZGOS
DE LA NEUROCIENCIA APLICADOS AL ÁMBITO EDUCATIVO
Los procesos de
enseñanza aprendizaje se han caracterizado principalmente por concebir a los
estudiantes como objetos, por tanto, no se toman en cuenta sus diferencias y se
los homogeneiza como si todos los individuos tuvieran similares procesos
mentales y cognitivos, generando así fracaso y deserción.
La neurociencia a partir de sus hallazgos pretende cambiar
dicha situación, recomendando lo siguiente (2):
-
La
emoción es un aspecto fundamental en
el aprendizaje, existe un binomio emoción-cognición indisoluble. Al parecer, la
información que captamos por medio de los sentidos pasa por el sistema límbico
o cerebro emocional antes de ser enviada la corteza cerebral encargada de los
procesos cognitivos. Por tanto, generar emoción a los estudiantes contando
historias, anécdotas y chistes relacionados con los contenidos, pueden ser importantes
disparadores de emoción que posibiliten una mayor implicación en lo que se
imparte.
-
En
la misma línea, es importante sorprender
a los estudiantes, este es un factor que activa la amígdala. El cerebro es un
órgano al que le gustan los patrones, entender cosas que se repiten siempre de
la misma manera. Todo lo que no forma
parte de esos patrones se guarda de manera más profunda en el cerebro, por ello
se recomienda a los docentes romper la monotonía a la hora de desarrollar su
labor.
-
El
ejercicio proporciona bienestar
físico y mental. Se ha descubierto que el ejercicio genera una proteína
que va al cerebro promoviendo la
plasticidad cerebral, generando nuevas neuronas, nuevas conexiones o sinapsis
en los centros de memoria. Por otro lado, el ejercicio genera endorfinas que
influyen en la sensación de bienestar, placer y optimismo, fundamentales para
la concentración y atención.
-
Existen
ventanas o periodos críticos en los que un aprendizaje es más favorecido que
otros, por ejemplo: la ventana para aprender a hablar, se abre al nacer y se
cierra a los siete años aproximadamente, pasada esa edad aprender a hablar le
será más dificultoso a los individuos.
Entre
los 10 a 12 años el cerebro tiene una
ventana específica para aprender aptitudes, manejar información, para razonar;
esta etapa es ideal para potenciar la comprensión de textos y promover el
razonamiento matemático.
-
En
los primeros años se aconsejase a poner a los infantes en contacto con la naturaleza,
para recibir estímulos, que les ayuden a construir formas, colores, movimiento,
profundidad, con los que luego se desarrollarán conceptos.
-
Durante
la adolescencia el cerebro es
plenamente emocional, por tanto, se debe tratar de acercar la ciencia a las
vidas de los adolescentes, incluir emoción, enganchar con su cerebro social.
-
La
neurociencia también aconseja adaptar los horarios escolares a los
ritmos biológicos. No es necesario que los estudiantes estén tantas horas en
clase, puesto que estas deberán ser mas vivenciales, entonces, se impartiría
mas conocimiento en menos tempo.
En suma, la
neurociencia y la neuroeducación, plantean cambiar la escuela, el colegio, el
instituto, la universidad, con el objetivo de mejorar los procesos enseñanza
aprendizaje, aprovechando los conocimientos relacionados al funcionamiento del
cerebro.
·
ALGUNAS
LIMITANTES PARA EL DESARROLLO DE LA NEURODOCENCIA EN LA EDUCACIÓN SUPERIOR
A pesar de los
beneficios que puede traer a la labor educativa, la mayoría de los docentes
universitarios, lamentablemente no aplican en aula los hallazgos de las
investigaciones en el área de las neurociencias, es decir, no se está
desarrollando una neuroeducación, esto puede deberse a la las siguientes
razones:
-
Si
bien los docentes universitarios pueden tener un alto nivel de conocimiento en
las asignaturas que imparten, se evidencia una escasa preparación en el área
pedagógica, andragógica y didáctica, que impide mejorar su práctica educativa.
-
La
gran cantidad de estudiantes en aula, que caracterizan al sistema educativo universitario
público, es otra de las razones que pueden ser una limitación a la atención a
las diferencias de aprendizaje de los estudiantes, obligando a su
homogenización, impidiendo por tanto, aprovechar las diversas potencialidades
de los educandos.
-
Existe
también en el sector docente una marcada resistencia al cambio, es decir,
muchos docentes imparten la asignatura, al igual que sus maestros,
reproduciéndose un modelo conductista memorístico, que no promueve un
aprendizaje significativo en los estudiantes.
-
Escasa
motivación intrínseca y extrínseca para mejorar la labor docente, que imposibilita
un cambio de actitud, tan necesario para mejorar la calidad educativa.
Las razones que se
esgrimen para no emplear los conocimientos de las neurociencias en aula y
migrando así a la neurociencia, pueden ser muchas, no obstante, se considera
que es tan sólo cuestión de actitud, de
conciencia e involucramiento de los docentes
universitarios, ya que según Francisco Mora[2], los docentes “son capaces de transformar el cerebro de
los alumnos, tano física, como químicamente, de la misma manera que un escultor con su cincel es capaz a de crear
una figura tan bella como el David”. (2)
Los docentes, de
acuerdo con la neuroeducación, deberían comenzar a aprovechar todo lo que se
conoce del funcionamiento del cerebro humano para enseñar mejor y que los
estudiantes además de desarrollar conocimientos, habilidades y
competencias, sean mejores seres
humanos.
A
MANERA DE CONCLUSION
Según Sócrates, cuando los estudiantes ven en el docente un brillo, una
hermosura, un “agalma”, un
objeto preciado del cual intentan tomar pedazos, se identifican con él y con los conocimientos que imparte; por
lo que el docente puede transmitir su
deseo de saber a sus estudiantes despertando en ellos su propio deseo, para
este fin, las neurociencias proporcionan una serie de herramientas que pueden
ser aprovechadas en el área educativa, mismas que toman en cuenta, la manera en
la que los estudiantes aprenden, las
emociones, los sistemas sensoriales y motores, sistemas atencionales,
motivación, ritmo sueño/vigilia, entre otras; y pueden permitir la generación
de importantes innovaciones en la práctica pedagógica, tendientes a mejorar la
calidad de la educación impartida en las universidades..
BIBLIOGRAFÍA
(1) Campos, A. L. Neuroeducación: Uniendo
las neurociencias y la educación en la búsqueda del desarrollo humano. La
Educación Revista Digital, Organización de los Estados Americanos, 143; 1-14
(2010)
(2) Sáez, C. Neuroeducación: Educar con
cerebro. Revista Visita Quo [Seriada en
línea] Disponible en: http://www.ub.edu/geneticaclasses/davidbueno/Articles_de_divulgacio_i_opinio/Altres/Neuroeducacion-QUO.pdf Consultado Abril 14, 2015.
(3) Doctorado en Ciencias – Mención en
Neurociencia de la Universidad de Valparaíso Chile [En línea]. [Citado 8 de
abril 2015]. Disponible en: http://www.dnuv.cl/index.php?option=com_content&view=article&id=36&Itemid=100013&lang=es
(4) Kandel, E.R. A new Intellectual framework for
Psychiatry. The American Journal of Psychiatry, 4, 457-469;1998
(5) Kandel, E.R., Schwartz, J.H., Jessell, T.M.
Neurociencia y conducta. España: Prentice Hall; 1997.