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lunes, 13 de julio de 2015

NEUROCIENCIAS Y NEUROEDUCACIÓN: ENSEÑANDO SEGÚN EL FUNCIONAMIENTO DEL CEREBRO



Erick Mita Arancibia
INTRODUCCIÓN

No cabe duda que la educación es una poderosa herramienta que permite transformar la vida de las personas y del entorno socioeconómico, por tanto, su mejoramiento en todos los niveles, debería ser interés de gobiernos, instituciones educativas, docentes y sociedad en general.

Sin embrago, pese a los intentos de organizaciones internacionales y de gobiernos por mejorar la educación, “millones de niños salen de la escuela sin haber adquirido las competencias y habilidades básicas como la lectura, escritura y cálculo (…), así como, es alto el porcentaje de jóvenes y adultos que son considerados funcionalmente analfabetos”. (1)

De acuerdo a lo anterior, es posible afirmar que las dimensiones del saber conocer, saber hacer, saber ser y saber aprender, no están siendo desarrolladas en las escuelas y peor aún en al ámbito de la educación superior boliviana, donde predomina una educación de tipo conductista alejada de la práctica, donde la memorización de contenidos pareciera ser el fin último de los proceso enseñanza aprendizaje.

Ante este contexto surge la neurociencia, como un enfoque desde el cual desarrollar la práctica educativa tomando en cuenta el funcionamiento del cerebro y los procesos mentales.

En este sentido, en el presente ensayo se pretende realizar una breve aproximación a la definición de neurociencia, para posteriormente analizar su relación con la educación, describir algunos hallazgos de la neurociencia aplicados al ámbito educativo y finalizar con algunas limitaciones que el contexto de las universidades públicas podría imponer a la aplicación de esta tendencia cuyo éxito es palpable en universidades europeas y norteamericanas. (2)

DESARROLLO

·         APROXIMACIÓN AL CONCEPTO DE NEUROCIENCIA 

En los  últimos años han surgido diferentes términos como ser neuromarketing, neuroeducación, neurodocencia, neurodidáctica, neuroarquitectura, neurobiología, entre otros. Todas estas denominaciones tienen un común denominador y forman parte de una tendencia interdisciplinar, denominada neurociencia, misma que puede ser definida, como:

 “Ciencias que estudian al sistema nervioso y al cerebro desde aspectos estructurales y funcionales (…)”. (1)
 “La Neurociencia es una área interdisciplinaria cuyo objetivo es comprender el funcionamiento del sistema nervioso”. (3)
“Es la ciencia que tiene  la capacidad de enlazar la biología molecular y los estudios cognitivos, ha hecho que se empiece a explorar la biología del potencia humanos, que podamos entender qué nos hace lo que somos”. (4)

Las Neurociencias cobijan un área del conocimiento que se encarga del estudio del Sistema Nervioso desde el funcionamiento neuronal hasta el comportamiento. Obviamente, la comprensión del funcionamiento del cerebro normal favorece el conocimiento y la comprensión de anormalidades neurobiológicas que causan desórdenes mentales y neurológicos. El propósito principal de las Neurociencias es entender cómo el encéfalo produce la marcada individualidad de la acción humana. Es aportar explicaciones de la conducta en términos de actividades del encéfalo, explicar cómo actúan millones de células nerviosas individuales en el encéfalo para producir la conducta y cómo, a su vez, estas células están influidas por el medio ambiente, incluyendo la conducta de otros individuos. (5)

Las neurociencias han cobrado gran interés en las últimas décadas, tanto por el conocimiento básico que genera como por su aplicación para mejorar la salud mental de la sociedad. Sus temas de interés se extienden desde la neurociencia molecular y computacional hasta la conducta, el aprendizaje y la memoria, y los efectos del estrés y envejecimiento sobre el funcionamiento del sistema nervioso. Esta gran diversidad temática hace de la Neurociencia un área interdisciplinaria, en la cual convergen biología molecular y celular, bioquímica, neurogenética, biofísica, farmacología, biología del desarrollo, matemáticas, neurofisiología, neuroanatomía, neuropsiquiatría y ciencias cognitivas en general. (3)

Cabe resaltar que al estudiar el funcionamiento del cerebro y de los procesos mentales, las neurociencias están posibilitando una mayor comprensión del proceso de aprendizaje, por lo que están siendo aplicadas en al ámbito educativo, es así  que científicos y profesionales del área educativa se encuentran trabajando con la finalidad de descifrar la interrelación entre lo biológico y la enseñanza.

·         NEUROCIENCIA Y EDUCACIÓN: NEUROEDUCACIÓN

Marc Prensky[1], señala, que el “sistema educativo actual es anacrónico. Los estudiantes se aburren. Enseñamos de la misma manera  desde hace 200 años. ¡No tiene ningún sentido!”. (2)

Repetir y memorizar datos ha sido la premisa con la que durante muchos años y aún en nuestros días algunos educadores encarar su actividad, este hecho ha originado muchos de los problemas que atraviesan no solo los sistemas educativos, sino también la sociedad. Al respecto es posible indicar que si bien el estudiante cumple un rol preponderante en los procesos  de enseñanza aprendizaje, el rol del docente no es menos importante, ya que su labor va dirigida a posibilitar el desarrollo de capacidades y competencias en los estudiantes, todo ello en un ambiente de trabajo caracterizado por el “gusto por el aprendizaje”, donde aprender no sea “aburrido”, sino “divertido”.

Entonces, las neurociencias deben constituirse  una herramienta que aporte con  nuevos conocimientos a los docentes, referidos a cómo funciona el cerebro, sus características, cómo se desarrollan los procesos de pensamiento, de memorización de aprendizaje, de recuperación de información, olvido, entre otros; para que a partir de su conocimiento y comprensión se puedan desarrollar propuestas pedagógicas  y   métodos didácticos de carácter innovador, orientados a generar un aprendizaje significativo en los estudiantes.

Es así que surge el concepto de neuroeducación, entendido como:

“Una nueva línea de pensamiento y acción que tiene como principal objetivo acercar a los agentes educativos a los conocimientos relacionados con el cerebro y el aprendizaje”. (1)

La neuroeducación toma los conocimientos generados por las neurociencias, pedagogía y psicología, con la finalidad de lograr una práctica pedagógica orientada y adecuada a los procesos de funcionamiento del cerebro de los educandos.

·         HALLAZGOS DE LA NEUROCIENCIA APLICADOS AL ÁMBITO EDUCATIVO

Los procesos de enseñanza aprendizaje se han caracterizado principalmente por concebir a los estudiantes como objetos, por tanto, no se toman en cuenta sus diferencias y se los homogeneiza como si todos los individuos tuvieran similares procesos mentales y cognitivos, generando así fracaso y deserción.

La neurociencia  a partir de sus hallazgos pretende cambiar dicha situación, recomendando lo siguiente (2):

-        La emoción es un aspecto fundamental en el aprendizaje, existe un binomio emoción-cognición indisoluble. Al parecer, la información que captamos por medio de los sentidos pasa por el sistema límbico o cerebro emocional antes de ser enviada la corteza cerebral encargada de los procesos cognitivos. Por tanto, generar emoción a los estudiantes contando historias, anécdotas y chistes relacionados con los contenidos, pueden ser importantes disparadores de emoción que posibiliten una mayor implicación en lo que se imparte.
-        En la misma línea, es importante sorprender a los estudiantes, este es un factor que activa la amígdala. El cerebro es un órgano al que le gustan los patrones, entender cosas que se repiten siempre de la misma manera.  Todo lo que no forma parte de esos patrones se guarda de manera más profunda en el cerebro, por ello se recomienda a los docentes romper la monotonía a la hora de desarrollar su labor.
-        El ejercicio proporciona bienestar físico y mental. Se ha descubierto que el ejercicio genera una proteína que  va al cerebro promoviendo la plasticidad cerebral, generando nuevas neuronas, nuevas conexiones o sinapsis en los centros de memoria. Por otro lado, el ejercicio genera endorfinas que influyen en la sensación de bienestar, placer y optimismo, fundamentales para la concentración y atención.
-        Existen ventanas o periodos críticos en los que un aprendizaje es más favorecido que otros, por ejemplo: la ventana para aprender a hablar, se abre al nacer y se cierra a los siete años aproximadamente, pasada esa edad aprender a hablar le será más dificultoso a los individuos.
Entre los 10 a 12 años  el cerebro tiene una ventana específica para aprender aptitudes, manejar información, para razonar; esta etapa es ideal para potenciar la comprensión de textos y promover el razonamiento matemático.
-        En los primeros años se aconsejase a poner a los infantes en contacto con la  naturaleza, para recibir estímulos, que les ayuden a construir formas, colores, movimiento, profundidad, con los que luego se desarrollarán conceptos.
-        Durante la adolescencia el cerebro es plenamente emocional, por tanto, se debe tratar de acercar la ciencia a las vidas de los adolescentes, incluir emoción, enganchar con su cerebro social.
-        La neurociencia también aconseja  adaptar los horarios escolares a los ritmos biológicos. No es necesario que los estudiantes estén tantas horas en clase, puesto que estas deberán ser mas vivenciales, entonces, se impartiría mas conocimiento en menos tempo.

En suma, la neurociencia y la neuroeducación, plantean cambiar la escuela, el colegio, el instituto, la universidad, con el objetivo de mejorar los procesos enseñanza aprendizaje, aprovechando los conocimientos relacionados al funcionamiento del cerebro.

·         ALGUNAS LIMITANTES PARA EL DESARROLLO DE LA NEURODOCENCIA EN LA EDUCACIÓN SUPERIOR

A pesar de los beneficios que puede traer a la labor educativa, la mayoría de los docentes universitarios, lamentablemente no aplican en aula los hallazgos de las investigaciones en el área de las neurociencias, es decir, no se está desarrollando una neuroeducación, esto puede deberse a la las siguientes razones:

-        Si bien los docentes universitarios pueden tener un alto nivel de conocimiento en las asignaturas que imparten, se evidencia una escasa preparación en el área pedagógica, andragógica y didáctica, que impide mejorar su práctica educativa.
-        La gran cantidad de estudiantes en aula, que caracterizan al sistema educativo universitario público, es otra de las razones que pueden ser una limitación a la atención a las diferencias de aprendizaje de los estudiantes, obligando a su homogenización, impidiendo por tanto, aprovechar las diversas potencialidades de los educandos.
-        Existe también en el sector docente una marcada resistencia al cambio, es decir, muchos docentes imparten la asignatura, al igual que sus maestros, reproduciéndose un modelo conductista memorístico, que no promueve un aprendizaje significativo en los estudiantes.
-        Escasa motivación intrínseca y extrínseca para mejorar la labor docente, que imposibilita un cambio de actitud, tan necesario para mejorar la calidad educativa.
Las razones que se esgrimen para no emplear los conocimientos de las neurociencias en aula y migrando así a la neurociencia, pueden ser muchas, no obstante, se considera que  es tan sólo cuestión de actitud, de conciencia e involucramiento de los docentes  universitarios, ya que según Francisco Mora[2], los docentes “son capaces de transformar el cerebro de los alumnos, tano física, como químicamente, de la misma manera que un  escultor con su cincel es capaz a de crear una figura tan bella  como el David”. (2)

Los docentes, de acuerdo con la neuroeducación, deberían comenzar a aprovechar todo lo que se conoce del funcionamiento del cerebro humano para enseñar mejor y que los estudiantes además de desarrollar conocimientos, habilidades y competencias,  sean mejores seres humanos.

A MANERA DE CONCLUSION

Según Sócrates, cuando los estudiantes ven en el docente un brillo, una hermosura, un “agalma”, un objeto preciado del cual intentan tomar pedazos, se identifican con  él y con los conocimientos que imparte; por lo que el docente puede transmitir su deseo de saber a sus estudiantes despertando en ellos su propio deseo, para este fin, las neurociencias proporcionan una serie de herramientas que pueden ser aprovechadas en el área educativa, mismas que toman en cuenta, la manera en la que los estudiantes aprenden,  las emociones, los sistemas sensoriales y motores, sistemas atencionales, motivación, ritmo sueño/vigilia, entre otras; y pueden permitir la generación de importantes innovaciones en la práctica pedagógica, tendientes a mejorar la calidad de la educación impartida en las universidades..

BIBLIOGRAFÍA

(1)  Campos, A. L. Neuroeducación: Uniendo las neurociencias y la educación en la búsqueda del desarrollo humano. La Educación Revista Digital, Organización de los Estados Americanos, 143; 1-14 (2010)
(2)  Sáez, C. Neuroeducación: Educar con cerebro. Revista Visita Quo  [Seriada en línea] Disponible en: http://www.ub.edu/geneticaclasses/davidbueno/Articles_de_divulgacio_i_opinio/Altres/Neuroeducacion-QUO.pdf Consultado Abril 14, 2015.
(3)  Doctorado en Ciencias – Mención en Neurociencia de la Universidad de Valparaíso Chile [En línea]. [Citado 8 de abril 2015]. Disponible en: http://www.dnuv.cl/index.php?option=com_content&view=article&id=36&Itemid=100013&lang=es
(4)  Kandel, E.R. A new Intellectual framework for Psychiatry. The American Journal of Psychiatry, 4, 457-469;1998
(5)  Kandel, E.R., Schwartz, J.H., Jessell, T.M. Neurociencia y conducta. España: Prentice Hall; 1997.




[1] Experto en educación e inventor del concepto “nativos digitales”.
[2] Neurocientifico.

sábado, 25 de abril de 2015

La religión como parte de la cultura en el contexto sociológico actual



 Ing. Erick Mita Arancibia


Las religiones y sus características, son estudiadas por la antropología cultural, existiendo diversas y encontradas definiciones planteadas por Darwin, Spencer,  Tylor, Freud, Weber, Durkheim, entre otros (Camarena y Tunal, 2009). Pese a ello, es posible indicar que la religión es una expresión cultural del ser humano que se debe aceptar y comprender. En esta perspectiva, Durkheim, intentó superar las barreras en la definición sobre la religión que se centraban sólo en las creencias en dioses y espíritus e indica que la religión es un cuerpo de prácticas y creencias relativas a las cosas sagradas, es decir, todo aquello que se identifica con las cosas relacionadas a dar unidad a una comunidad moral concreta (Morris, 1995). En este sentido, es posible encontrar que las religiones cumplen determinadas funciones para los grupos sociales:
·         Sirve de enlace entre los grupos humanos y posibilita la coexistencia social entre los miembros que practican una religión en particular.
·         Las religiones posibilitan solventar algunas de las múltiples necesidades humanas.
·         Lo religioso opera como una entidad explicativa de los fenómenos que los seres humanos no podemos explicar.
·         La concepción de dios, a través de la religión es una de las características propias de la constitución humana que contribuye a construir la personalidad en la infancia y a asegurar la cohesión social a través de la configuración de un ethos colectivo.
·         La religión impone determinadas restricciones en la vida de los seres humanos, estableciendo aquello que es bueno o malo, posibilitando a la colectividad establecer moralmente lo que es bueno y lo que es malo.
De acuerdo a lo anterior, la vida social no puede concebirse sin una dimensión religiosa, ya que a través de ella es posible analizar el estatus moral que rige una sociedad, así como la cosmovisión que se guarda en torno de ella, lo que brinda una identidad única a los habitantes que en ella residen.

Una vez descrita de forma muy breve alguna noción sobre religión y sus funciones, es preciso analizar algunos elementos que podrían explicar el fenómeno religioso en el mundo actual, para ello, se hará referencia a la religión como elemento de identidad  social e individual, el fundamentalismo religioso, la necesidad de la religión en un mundo globalizado y deshumanizante.

·         No cabe duda, que la religión acompaña al hombre y a la sociedad como elemento básico de la composición identitaria de los individuos y de la colectividad social. Es decir, la religión determina en muchos casos la forma de pensar de las sociedades permitiendo su cohesión, pero también diferenciándola del resto que no practica similares creencias. Por tanto la religión en el mundo actual al igual que en el pasado puede ser un elemento que divide a los seres humanos y conglomerados sociales.
·         Cuando se considera a la religión  como parte de una forma de vida o en sí misma una forma de vida entre los practicantes de determinada religión, que les diferencia de otros grupos sociales que conciben la realidad de forma diferente y quizás opuesta, se pueden producir posturas fundamentalistas sustentadas por el mandato de fuentes divinas que confieren a ciertas reglas o dogmas religiosos un carácter de verdad definitiva, incuestionable que deben ser respetados de manera absoluta, se presentan casos intolerancia religiosa que generan un quiebre y alteración en la convivencia social, tal es el caso de los ataques del 11 de septiembre al World Trade Center y recientemente el ataque a los periodistas de la Revista Charlie Hebdo. Por tanto, es necesario tolerancia, comprensión y respecto a las distintas  formas de identidad religiosa, para posibilitar la convivencia  entre las personas en un marco de mutuo crecimiento e igualdad. (Almeyra, 2004)
 La globalización, la incursión de las tecnologías de la información y comunicación, de las redes sociales, la crisis económica generalizada, están alterando a las sociedades que dada la necesidad de proveer sustento a sus miembros están dejando de lado el papel de socialización de la infancia -entendiéndose por este fenómeno, la transmisión de valores, normas éticas y de conducta a los niños principalmente por parte de lis padres de familia y la religión -, por tanto, los niños y jóvenes en muchas sociedades tienen escasos y/o carecen de los valores, normas de conducta y comportamiento, para asegurar su pleno desenvolvimiento en la sociedad, situación que se evidencia en los altos niveles de criminalidad que se presentan hoy en día. Haciendo necesario volver a la religión como elemento de transmisión de valores y de cohesión de la sociedad.
Para finalizar es posible indicar, que la religión acompaña a las sociedades como un elemento sustancial en la configuración del individuo y que forma parte de su identidad y accionar social, por ello, la importancia del fenómeno religioso para la sociedad, es que de él depende  gran parte del accionar moral y convivencia social.
BIBLIOGRAFÍA
·         Almeyra, G. (2004) “Tolerancia, racismo, fundamentalismo y nacionalismo” en Políica y Cultura Revista de la Universidad Autónoma Metropolitana de Xochimilco. Número 21.
·         Camarena, Elena; Tunal, Gerardo (2009) “La religión como una dimensión de la cultura” en Revista Crítica  de Ciencias Sociales y Jurídicas de la Universidad Complutense de Madrid. Número 22, febrero 2009.
·         Castillo, Franklin. (1999) “El proceso educativo en el paradigma de la complejidad”. [En línea]. Chile, disponible en: http://www.ilustrados.com/tema/1099//proceso-educativo-paradigma-complejidad.html [Accesado el día 5 de febrero de 2015]
·         Cerda Gutiérrez, Hugo (2008) Los Elementos de la investigación. Santafé de Bogotá, El Búho.
·         Hernández Sampieri, Roberto y Otros (2003). Metodología de la investigación. 4ª edición. México, Mc Graw Hill.
·         Morris, B. (1995) Introducción al estudio antropológico de la religión. Barcelona, Ed. Paidós.


domingo, 15 de marzo de 2015

SURGIMIENTO DE GRUPOS SOCIALES, EN LA MODERNIDAD LIQUIDA



 Erick Mita Arancibia

Fenómenos tales como la migración, la globalización, el consumismo, la alta penetración de las redes sociales en vida de las personas, el individualismo, la filosofía del mínimo esfuerzo, han cambiado la vida de las personas y de las sociedades. Según  Bauman, las sociedades han cambiado de “sólidas” a “líquidas”, adoptando estas últimas características, como: el deseo de “tenerlo todo ya” y  la falta de compromiso, en suma,  la movilidad, incertidumbre y relativización de valores son la norma característica de las sociedades.
Lo anterior está causando que los modos de convivencia social se modifiquen,  siendo la exclusión del otro, su invisibilización y el despojo de la identidad, estrategias empleadas por las  sociedades para regular  el modo de vida de las personas. Este tipo de acciones están dando lugar a grupos de personas que no encajan en el marco de las sociedades  liquidas, produciendo grupos sociales, grupos de excluidos, subculturas urbanas  entre otras denominaciones; mismos que pugnan por mantener una identidad diferenciadora del resto de los individuos, como mecanismo de defensa ante la vorágine consumista y homogeneizadora de la sociedad actual.
Es así que han surgido grupos sociales diversos con reivindicaciones de tipo  identitario, como de defensa y demanda de derechos, que cada vez más ocupan un espacio más visible en la sociedad, contando con representantes en el ámbito político, económico, cultural, social, educativo, etc.  Siendo el elemento unificador de los colectivos sociales aspectos tales, que van desde el credo religioso, la preferencia sexual, la pertenencia étnica o cultural,  , la carencia de alguna posesión, una ideología en particular, la práctica de cierto deporte o afición, hasta el tipo de música preferida.
En este orden de cosas, es necesario entender la emergencia del surgimiento de nuevos grupos sociales desde una sociología reflexiva o sociología del cambio, perfectamente compatible y comprensible desde la perspectiva del  pensamiento complejo. Se considera sumamente importante analizar y comprender el fenómeno del surgimiento de nuevos grupos sociales, no solo para entender las características de la sociedad, sino como para poder desde diferentes ámbitos desarrollar intervenciones tendientes a la  integración social y satisfacción de necesidades, que tengan por objetivo final el bienestar común.